Viernes 27, llega el sms de
Ernesto para ir a las Zetas de La Pedriza. Este año no me iba a pillar
desprevenido, así que tenía que demostrar mi súper-preparación. Después de las
consultas de rigor, confirmo mi asistencia,
a las 8.30 en Canto Cochino, así que toca madrugar. Llamo a dos
amigos, pero no están disponibles. Ernesto lleva a su cuñado y oros dos amigos.
El desayuno no me sienta muy
bien, no sé si por las prisas o por el membrillo, y llego con uso minutos de retraso, pero la
salida se demora hasta las 9.00.
La verdad es que no somos muy
originales y buscando el track en internet está súper –trillado, pero no por
ello, menos espectacular.
Al ser madrugadores el paso al
parque Regional todavía no está cortado y te dan una bolsa de basura y un mapa.
Lo malo de esta ruta es que
empiezas directamente subiendo ¡y qué subida! Hasta el mirador de Los Pastores.
En el mirador de Los Pastores, con la maliciosa al fondo.
Se nota el entrenamiento, hasta aquí bastante bien, unos 11 kms, en una hora. Ya desde la salida Ernesto viene amenazando
con la subida a La Nava. El cuñado de Ernesto, después de sufrir el año pasado
con el hierro que le dejaron, se ha traído su bici desde Inglaterra y va como
una moto y sus amigos también suben bien, vamos pasando algunos grupitos,
algunos con averías y uno con niños que se paran a descansar, creo que los
padres no somos muchas veces conscientes de las limitaciones de los peques.
Este año el tiempo no tiene nada
que ver con el año pasado y en la subida se gradecían las sombras de las zonas
arboladas. Unas fotos y un ligero refrigerio y me pongo la sudadera que se
agradece en la bajada. Rápidamente llegamos al desvío a La Nava y vamos hacia
arriba. Debe ser por lo pronto del día o porque la gente ya conoce la dureza
del tramo que nos encontramos con muy pocos ciclistas y algún senderista. Los
4,5 kms iniciales son 5,5, pero al final la sudada merece la pena. Mientras descansamos
en “la cumbre” van llegando otros grupos de ciclistas y ya en la bajada nos
encontramos bastantes. Desde arriba espera una rápida bajada hasta el punto de
partida que cada uno afronta a su ritmo,
pero siempre con precaución, vemos un par de incidentes, creo que sin
consecuencias.
Al final unas 4 horas para unos
38,5 kms.
Cuando me arreglen el cambio
volveremos.